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Juego de cartas muy adictivo donde el objetivo es reunir cuatro órganos sanos, vacunados o inmunizados para ganar la partida.
Tiene un componente de suerte con las cartas que vayan saliendo a cada jugador, así como la buena gestión y utilización de las cartas que tengas en mano, con el inconveniente de que el máximo permitido es de 3 cartas.
Se trata de un juego de cartas rápido cuyas partidas duran una media de entre 5 y 10 minutos siendo 2 jugadores y entre 10 y 20 minutos siendo de 3 a 6 jugadores.
Hay cuatro tipos de órganos de distintos colores: amarillo, azul, verde y rojo además de uno multicolor. Existen vacunas y virus con los mismos colores que los órganos para intentar inmunizar los tuyos o infectar el de los contrarios y evitar, de este modo, que ganen la partida antes que tú.
Los virus y vacunas multicolores se pueden utilizar en cualquier órgano sin importar su color, pudiendo haber una carta de su color y otro multicolor. Por ejemplo, sobre el estómago verde puede hacer un virus multicolor y un virus de color verde. Del mismo modo que sobre un órgano multicolor puede haber un virus rojo y otro virus azul.
En el caso de colocar dos vacunas sobre un órgano, éste se considera inmunizado, no pudiendo colocar ningún virus encima de él. En caso de colocar dos virus sobre un órgano, éste se destruye y se pone en la pila de descartes.
Dentro del juego, nos encontramos con las cartas de tratamiento de color morado. Entre ellas está el trasplante, la cual intercambia un órgano por otro entre dos jugadores cualesquiera sin importar si están sanos, infectados o vacunados, siempre y cuando ninguno de los dos jugadores tenga dos órganos del mismo color ni éstos estén inmunizados.
También está la figura del ladrón de órganos que permite robar un órgano de otro jugador para añadirlo a tu cuerpo, pero sin tener dos órganos del mismo color y siempre y cuando éste no estuviese inmunizado.
Otra carta de tratamiento es el contagio, la cual nos traslada tantos virus como puedas de tus órganos infectados a los órganos de los demás jugadores, pero solo podrás contagiar órganos libres, es decir, que no estén vacunados ni infectados.
Otro tratamiento que nos encontramos la carta de guante de látex con la que conseguimos que todos los jugadores, excepto el que usa esta carta, se descarten su mano. De esta manera conseguimos que el siguiente turno no puedan jugar ninguna carta ya que tendrían que robar tres para quedarse con la mano completa, perdiendo así un turno de juego.
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